lunes, 21 de diciembre de 2015

Las segundas partes no siempre fueron malas

Estas últimas semanas están siendo toda una locura (y en concreto está última), a pocos de días de meternos de lleno en Navidad y con gripazos que te dejan más pa’ allá que pa’ cá (y es que no se vosotr@s pero a mí me faltan horas e incluso días enteros). En noviembre siempre tengo la sensación que voy a poder llegar a todo, pero es que luego me olvido de lo rápido que pasa el tiempo y en un pis pas…. 25 de diciembre… fum fum fum!!

Es por eso que con todo el ajetreo que las Navidades conllevan he querido hacer un stop en el camino para poder escribir esta entrada que nada tiene que ver con árboles de Navidad ni belenes… nuestra última escapada familiar. 

Fue a un sitio al que ya dediqué una entrada meses atrás, quisimos repetir porque nos quedamos con la sensación de querer ver más... y así fue! El destino escogido? El lago de BanyolesEn esta ocasión íbamos más preparados que en la anterior, nuestra idea era dar la vuelta entera al lago, así que íbamos bien equipados. Decidimos que Z era pequeño todavía para aguantar el recorrido andando por lo que trajimos su bicicleta, para que el camino fuese mas ameno.




Llegamos prácticamente a la hora de comer, así que empezamos a caminar alrededor del lago hasta dar con un sitio para comer, y para nuestra sorpresa era un lugar precioso, os aseguro que estábamos solos y mas idílico no podía ser.





La estampa del lago con las montañas nevadas al fondo es impresionante, me encanta ese contraste, es una de las cosas que no pudimos apreciar la última vez. Es bueno visitar los mismos sitios en diferentes épocas del año, la diferencia puede ser espectacular!

Y el pequeño Z podemos decir que fue todo un campeón, al principio de la caminata se hizo un poco el remolón con la bicicleta pero una vez paramos a comer ya no la soltó mucho mas. Se recorrió el lago entero pedaleando y os puedo asegurar que 7,7km para un niño de 4 años es toda una hazaña, y lo mejor de todo, que se lo pasó pipa escrutando cada rincón del lago.







Si no habéis estado en este pueblo o por lo contrario si que lo habéis visitado pero únicamente conocéis la parte mas turística del lago, os recomiendo enormemente que hagáis el recorrido. Se puede hacer andando, corriendo, en bicicleta... son muchas las personas que lo realizan, tanto niños, adultos y ancianos; y es un plan ideal para disfrutar un fin de semana con la familia.

Espero que os haya gustado, y si conocéis lugares o pueblos bonitos que visitar me encantaría que me recomendarais. Os deseo a todos que paséis unas felices fiestas y deseo haberos evadido (aunque únicamente sea por unos minutos) del estrés que proporcionan estos días previos.

Nos leemos pronto!


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